Búsqueda de DNS

DNS significa Sistema de Nombres de Dominio (DNS) y convierte los nombres de sitios web (como linkedin.com) en direcciones IP (como 13.107.42.14). Los navegadores los utilizan para encontrar y conectar con los sitios web. Cada vez que quieres acceder a un sitio web determinado, los servidores DNS identifican la dirección IP correspondiente para ayudarte a llegar al sitio web correcto. Esto te permite usar nombres de dominio fáciles de recordar en lugar de direcciones IP complicadas.

Los registros DNS son archivos de texto almacenados en los servidores DNS. Su función principal es asociar nombres de dominio con direcciones IP, pero también actúan como instrucciones para gestionar las solicitudes relacionadas con el dominio.
Además, pueden incluir otros datos esenciales sobre el funcionamiento del dominio. Algunos de los tipos más comunes de registros DNS son:

• Registros A: Asignan nombres de dominio a direcciones IPv4.
• Registros AAAA: Asocian la dirección IPv6 de un dominio.
• Registros MX: Gestionan el enrutamiento de correo electrónico.
• Registros CNAME: Vinculan subdominios a dominios principales sin asignar una dirección IP.
• Registros TXT: Almacenan notas de texto legibles tanto para personas como para máquinas, y se utilizan a menudo para evitar el spam y verificar la propiedad del dominio.
• Registros NS: Indican qué servidores de nombres tienen autoridad sobre tu dominio.

El objetivo principal del DNS es traducir nombres de dominio fáciles de recordar en direcciones IP que las máquinas pueden entender. Además, el DNS gestiona una enorme base de datos global con toda la configuración relacionada con los dominios. Este proceso ocurre cada vez que navegas por sitios web, envías correos electrónicos, haces clic en enlaces, etc. Asimismo, te dirige al servidor disponible más cercano, lo que hace que tu experiencia en internet sea más rápida y fiable.

La configuración del DNS juega un papel fundamental en el SEO. Afecta la forma en que los motores de búsqueda acceden a tu sitio web, la velocidad de carga de las páginas, la disponibilidad del sitio web y la seguridad general.

Cuando el DNS es lento o está mal configurado, las páginas web pueden tardar mucho en cargarse o, en el peor de los casos, los usuarios no podrán acceder al sitio en absoluto. Además, si los robots de los motores de búsqueda no logran rastrear correctamente tu sitio web, esto puede afectar negativamente al SEO. Por eso, es fundamental detectar y resolver cualquier problema de DNS lo antes posible.

Además, configurar correctamente el DNS ayuda a que tu contenido se cargue más rápido y protege tu sitio de ataques. Ambas situaciones pueden afectar el posicionamiento de tu web en las SERP.

Esto se vuelve aún más importante para el SEO internacional, donde una configuración correcta de DNS puede mejorar tu capacidad para llegar a audiencias de todo el mundo. La configuración de tu DNS, ya sea mediante dominios específicos de cada país (ccTLD) o subdominios regionales, ayuda a los motores de búsqueda a entender a qué región o público va dirigido tu contenido. Una configuración incorrecta puede hacer que tu sitio aparezca en los resultados de búsqueda de regiones equivocadas o que no se posicione bien en tus países objetivo.

Los servidores DNS funcionan de la siguiente manera:

1. Al introducir un nombre de dominio, se inicia un proceso llamado búsqueda de DNS, que relaciona el nombre de dominio con su dirección IP. El navegador envía la consulta a través del proveedor de internet a un solucionador recursivo DNS.
2. El solucionador recursivo primero busca en su caché una dirección IP coincidente. Si encuentra una coincidencia, envía la información a tu ordenador, completando el proceso.
3. Si la información no se encuentra en caché, el solucionador recursivo consulta un servidor raíz DNS para determinar dónde encontrar el dominio. El servidor raíz lo redirige al servidor TLD correspondiente (como .com, .org, .net), que contiene información clave sobre los dominios. Por ejemplo, al buscar linkedin.com, la solicitud se dirige al dominio de nivel superior (TLD) .com.
4. El solucionador recursivo consulta al servidor TLD (por ejemplo, .com) para obtener información sobre el dominio solicitado.
5. El servidor de nombres TLD devuelve la dirección IP real del servidor de nombres del dominio (en este caso, linkedin.com).
6. El solucionador consulta ese servidor de nombres del dominio.
7. El servidor de nombres del dominio devuelve la dirección IP de linkedin.com.
8. El solucionador devuelve la dirección IP del dominio solicitado al navegador.
9. El navegador envía una solicitud HTTPS a la dirección IP de destino.
10.  El servidor en esa dirección IP responde mostrando la página web y estableciendo la conexión con el sitio deseado.

El DNS dinámico (DDNS) es un servicio que actualiza automáticamente la dirección IP asociada a tu nombre de dominio cada vez que esta cambia. Dado que muchos sitios web y API dependen de direcciones IP dinámicas, puede ser difícil para los administradores asociar un nombre de dominio estable (que luego debe almacenar una dirección IP en los registros DNS) con sus recursos. El DNS dinámico resuelve este problema actualizando automáticamente la IP asociada al dominio, asegurando que los usuarios siempre accedan al recurso correcto sin necesidad de ajustes manuales.